¿Qué es Dharma?

El Dharma es un concepto de origen sánscrito, significa literalmente “ley, realidad o conducta correcta”. Es un concepto escuchado comúnmente en diversas religiones de origen védico ( budismo, hinduismo, janaismo, etc. )

El Dharma es una palabra que no existe en sí en otros idiomas, podemos acercarnos a su traducción, pero en sí, no es un concepto con el cual estemos familiarizados en occidente. 

En textos importantes para el Hinduismo como el Bhagavad-gita ( El canto del señor II a.C. ) el Dharma es un concepto que ya esta presente. En el primer capítulo “El desaliento de Arjuna” nos van relatando la historia y el dilema en el cual Arjuna (el protagonista de la historia) se ve arrebatado por sus pensamientos en medio de una guerra a punto de suceder en el campo del Kurushetra.

Arjuna pide intervención divina, Sri Krishna que en ese momento toma forma humana para guiarlo, le explica a su vez en los versos siguientes el sentido y la aplicación del concepto de Dharma en su vida. Explica conceptos yogicos y ayuda a Arjuna y todos los que leemos el texto a encontrar la luz dentro de su deber y sendero espiritual.

En el Hinduismo el Dharma es el primer pricipio de los componentes del Purusartha “objeto de búsqueda ” el cual se refiere los 4 objetivos del ser humano:

Dharma (valores morales)

 Artha (prosperidad y valores económicos)

 Kama (placer, amor) 

Moksha (liberación, espiritualidad)

En el Budismo el Dharma se define como “ley universal” o mayormente conocido como “doctrina”. Es un concepto bastante bien conocido y forma parte de una de las tres joyas del Budismo o manis (tesoros). Es por eso que el concepto de Dharma es muy familiar y usado en el budismo y constituye  unos de los pilares del “triple refugio” Tripitika o Canon padi que está conformado por:

Los sutras (enseñanza de Budha)

Vinainas (reglas monásticas) 

Abhidharma ( comentarios de las enseñanzas de sabios)

Este  concepto para nosotros occidentales es muy difícil de moldear. Normalmente en nuestra educación en la niñez o ya como adultos no nos enseñan a tener en cuenta que también es indispensable e importante que tengamos una responsabilidad social y un deber moral. 

Nos hacemos pensar que fluimos con la vida, de forma automática y a veces condicionados por un esquema social por el simple hecho de estar aquí . Pero no nos hacemos responsables del peso de nuestras acciones y pensamientos con nosotros y con nuestro alrededor.

Quizás no todos estamos tan inmersos en una religión o en alguna causa social para aplicar  un concepto tan integro como en el budismo o hinduismo. Pero el Dharma aplicado es más fácil de lo que pensamos, solo requiere un auto análisis y honestidad, mucha honestidad. 

Si estamos interesados en mejorar nuestra vida o ser fieles a nuestra práctica podemos pensar en algo en lo cual podemos aportar. Puede ser en nuestro mismo rol social, como padre, madre, hijo, estudiante, practicante, prefesionista, yogui, etc. Podemos pensar en cómo y qué mejorar en alguna  sección  de nuestra vida.

¿Cuál es mi deber y aporte para hacer que las cosas o situaciones mejoren?, ¿Dónde y cómo puedo aportar algo de significado que esté basado en mi valores? 

Quizás no tenemos que salir de nuestro círculo para encontrar la respuesta. Quizás no tenemos que ser tan exagerados en las soluciones. Solo siendo mejores padres, mejores hijos, honestos, honrados, mejores personas, personas congruentes. 

Podemos regresar a nuestros valores sociales de respeto y tolerancia, saber que no sólo soy un individuo, sino, que también afecto a un colectivo.  Saber que cada día cuenta y cada día puedo ayudar a crear algo mejor siendo mi mejor yo, esa es la solución. Es ahí quizás que estamos aplicando y viviendo un Dharma moderno. 

Sin duda, no hay algo más real que explorar nuestra naturaleza sin velos que opaquen nuestra percepción y regresar a nuestro ser natural, la verdad eterna.